La Yeguada La Campana
Se encuentra situada en plena naturaleza, en lo que antes era conocida como "La Dehesa del Conde de la Garduña", a 20 kilómetros de Málaga.
Se trata de hectáreas de terreno de monte básicamente mediterráneo en el que los caballos se encuentran en condiciones de semilibertad
Esta yeguada es la reserva más importante de España del caballo conocido como Caballo Cartujano o Pura Raza Española (PRE) de Estirpe Cartujana.
Belleza, fuerza y espectacularidad son las características que han dado prestigio internacional y orgullo nacional a esta Yeguada.
Los orígenes de esta yeguada se pierden en el tiempo, pero se sabe que en los montes que hoy ocupa la yeguada , se alzaba un monasterio Cartujo, al que un poderoso terrateniente no pudo pagar el censario, y lo sustituyó con las mejores yeguas y sementales que poseía. Los monjes cuidaron de estos caballos y los mejoraron, seleccionando siempre los ejemplares de mayor belleza y armonía. Todo parecía en paz hasta los inicios del s XIX momento en que España fue invadida por tropas napoleónicas.
Hubo una guerra y los monjes emprendieron la huida hasta que tras muchas vicisitudes, fueron finalmente expulsados de sus tierras en el año 1835. Momento en que Don Gerardo del Campanario, Conde de La Garduña, compra los terrenos, los derechos de explotación y las cabezas de ganado que en él habitaban y ya nunca se deshace de ellos. Hoy, su descendiente más directa, Doña Valeria de La Torre y su marido Don Ricardo del Castillo, continúan con la labor de crianza y selección de estos hermosos ejemplares, seiscientos años después de su fundación.
Se encuentra situada en plena naturaleza, en lo que antes era conocida como "La Dehesa del Conde de la Garduña", a 20 kilómetros de Málaga.
Se trata de hectáreas de terreno de monte básicamente mediterráneo en el que los caballos se encuentran en condiciones de semilibertad
Esta yeguada es la reserva más importante de España del caballo conocido como Caballo Cartujano o Pura Raza Española (PRE) de Estirpe Cartujana.
Belleza, fuerza y espectacularidad son las características que han dado prestigio internacional y orgullo nacional a esta Yeguada.
Los orígenes de esta yeguada se pierden en el tiempo, pero se sabe que en los montes que hoy ocupa la yeguada , se alzaba un monasterio Cartujo, al que un poderoso terrateniente no pudo pagar el censario, y lo sustituyó con las mejores yeguas y sementales que poseía. Los monjes cuidaron de estos caballos y los mejoraron, seleccionando siempre los ejemplares de mayor belleza y armonía. Todo parecía en paz hasta los inicios del s XIX momento en que España fue invadida por tropas napoleónicas.
Hubo una guerra y los monjes emprendieron la huida hasta que tras muchas vicisitudes, fueron finalmente expulsados de sus tierras en el año 1835. Momento en que Don Gerardo del Campanario, Conde de La Garduña, compra los terrenos, los derechos de explotación y las cabezas de ganado que en él habitaban y ya nunca se deshace de ellos. Hoy, su descendiente más directa, Doña Valeria de La Torre y su marido Don Ricardo del Castillo, continúan con la labor de crianza y selección de estos hermosos ejemplares, seiscientos años después de su fundación.
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